Trabajos, exposiciones, exámenes, apuntes, compañeros, tutorías… Y todo ello sin dejar de estudiar… ¿Sabes lo que es el Estrés? pues con todo esto, si lo sufres, poco más te podemos explicar, porque lo conoces al detalle.
Seguro que más de una vez has sentido ansiedad, o sientes que no llegas a determinados sitios, o a realizar determinadas tareas. Y piensas que es la carga normal de trabajo, pero debemos comenzar a llamar las cosas por su nombre. Se trata de estrés académico.
Si tan difícil es detectarlo, y sobre todo, asumirlo, más complicado es enfrentarte a él. Haciendo que el estudiante se paralice a la hora de cumplir con determinada tarea.
Sucede en todas las áreas tanto para estudiantes de primaria y secundaria como para estudiantes universitarios.
Cómo enfrentarte al estrés académico
El estrés académico tiene múltiples síntomas como lo son el dolor de cabeza, dolor de espalda, cansancio, fatiga e impotencia, ansiedad, inquietud y cambios de humor. Por tales razones es necesario aprender sobre el manejo del estrés para que cuando este aparezca no afecte en tu rendimiento personal ni el rendimiento de tus estudios.
Es adecuado pararse a pensar los pasos que debes seguir en ese momento, para llegar al objetivo final y elegir el camino adecuado.
Las siguientes técnicas pueden ayudarte a apartar las sensaciones negativas y centrarte en tus estudios, para sacar el mayor rendimiento de tu tiempo y esfuerzo:
1. Establece prioridades
Debes alejarte de todas las distracciones posibles, es decir, necesitas tener único enfoque durante tus horas de estudio. Es por esto que debes establecer prioridades, enfocadas a lo que estás haciendo.
De esa forma aumentas tu concentración y tu prioridad no se verá desviada.
Debes elegir entre las varias técnicas de estudio cuál se adapta más a tus necesidades y te resulta relevante para desarrollar el problema establecido.
Entre todos los temas a tratar identifica en cuál debes enfocarte más y porque requieres más estudio y priorízalo, ya que debes reforzarlo.
2. Establece un horario
Es necesario que establezcas horarios personalizados para tus estudios académicos, ya sean tus estudios de instituto, universidad o doctorado, en en extranjero o en tu propia ciudad, en realidad es necesario para cualquier clase de estudio que pretendas realizar.
Puesto que de esa forma tienes la disposición adecuada para cada momento del día, tanto en los momentos de descanso, como en las horas de estudio que determines en tu semana.
Elige el horario que se adapte a ti, tanto para entregas de trabajos, repasos, exámenes, como para horas de dedicación a estudiar.
3. Aprende a decir no
¿Cómo enfrentar el estrés académico?, es una pregunta que nos hacemos en muchas ocasiones, y una de las respuestas es saber decir No, no a situaciones que comprometan tus momentos de estudio con otras actividades, no a adquirir más tareas de las que ya te has establecido y se salen de tu ámbito académico, no a exigirte más de lo que tus capacidades y cuerpo pueden dar, no a extralimitar tus horarios.
Aléjate de las redes sociales mientras estás estudiando, deja tu teléfono a un lado, debes entrenar a tu celebro para que se centre en la tarea que esté desempeñando para que no pierdas la concentración.
No pierdas tus objetivos, se responsable a la hora de organizar tu tiempo y tus metas.
4. Establece un límite de tiempo
Organiza tu tiempo y las horas de estudio, la memoria se estimula mediante descansos; cuando le das un respiro puede adquirir la información y procesarla de manera adecuada. Esto ayuda a que cuando regreses a tus horas de estudio tú te sientas con más energía.
5. Establece un lugar de trabajo
Debes tener un espacio de trabajo determinado, el sofá o la cama no son lugares óptimos, para esta actividad, ya que están establecidos para el descanso y tu mente y cerebro lo saben.
No importa si tus estudios son de tiempo parcial, tiempo completo o son estudios en línea, debes elegir un espacio donde puedas mantener el enfoque y la concentración, que tenga buena iluminación y sea tranquilo; el silencio es necesario para la retentiva de la información.
Esto ayuda a que evites el estrés académico, sobre todo si tienes a tu disposición los materiales que puedas llegar a necesitar.
6. Establece una rutina de descanso
Puedes establecer bloques de estudios en los cuales descanses de 10 a 15 min, repasando las temáticas necesarias en cada bloque, pero sin saturarte y entendiendo que debes parar.
7. Utiliza herramientas de productividad
Utiliza todas las herramientas de productividad que te sean necesarias para facilitar tu retentiva, concentración, aprendizaje y rendimiento, esto te ayudará a tener una mejor organización en tus tareas y aprenderás cómo evitar el estrés académico.
Existen múltiples herramientas como Google Calendar, hacer tus propias checklists, utilizar post it, imprimir todos los materiales que necesitas en buena calidad, para tener facilidad de acceso a los apartados que subrayes y consideres importantes, debes tener una libreta de apuntes, hacer mapas mentales y esquemas.
Todo esto te facilitará tu productividad, mantendrá tu motivación, tendrás una planificación y mejorará tu rendimiento.
8. Busca ayuda profesional
Sí no sabes cómo enfrentar el estrés académico y has intentado implementar todas las técnicas antes mencionadas, es necesario que busques a un profesional, que te ayudé en tu proceso y guie de la mejor manera para que puedas sobre llevar el estrés o lo puedas controlar.
La ayuda profesional es indispensable ellos tienen las herramientas necesarias y el conocimiento para hacer de este proceso algo más tranquilo, existen diversidad de terapias, así que podrán identificar cuál es la que más se adapta a tus necesidades específicas.
