Sabemos que organizarse para estudiar no es tarea fácil. Entre apuntes, exámenes, trabajos y distracciones, puedes sentir que no te da la vida. Pero no te preocupes, aquí te traemos algunos trucos y consejos para organizar y planificar el estudio y para que pongas orden a tu tiempo de estudios y consigas aprovechar al máximo cada sesión.
Aprende a planificar con el Flowtime
Si el pomodoro ya no te convence o simplemente buscas algo más flexible, prueba con el método Flowtime.
Esta técnica, en lugar de dividir el tiempo en bloques fijos de trabajo y descanso (como en el pomodoro), te permite estudiar durante el tiempo que seas capaz de mantenerte concentrado. Aquí no hay reglas estrictas: tú decides cuándo parar para descansar, lo que te permite entrar en “estado de flow” y maximizar tu productividad.
El truco está en que, una vez pierdas la concentración, te tomes un respiro de unos 5 o 10 minutos y luego vuelvas a la carga. Esto evita que te frustres con pausas forzadas justo cuando más concentrado estás.
La magia de los mapas mentales
¿Sientes que tus apuntes parecen un campo de batalla donde las ideas se pierden? Los mapas mentales pueden ser tu solución.
Esta técnica visual te ayuda a organizar la información de manera lógica y clara. Solo necesitas una hoja en blanco y empezar con una idea central; desde ahí, vas conectando conceptos, palabras clave o imágenes.
Este método no solo te ayuda a entender mejor, sino que también hace que el repaso sea mucho más sencillo y sobre todo, visual.
Prioriza tu tiempo con la regla de Pareto
La regla de Pareto (o la regla 80/20) es ideal para los que sienten que no llegan a todo. Esta técnica sugiere que el 20% de tu esfuerzo produce el 80% de los resultados. En otras palabras, identifica qué partes de tu temario son las más importantes y concéntrate en ellas.
Esto te ayudará a planificar mejor tu tiempo de estudios, especialmente si estás en la recta final antes de un examen.
Haz una lista de tus temas y clasifícalos según su relevancia o la frecuencia con la que crees que pueden salir en el examen. Así, podrás dedicar más energía a lo que realmente cuenta.
Elige un entorno libre de distracciones
Todos sabemos lo difícil que es concentrarse cuando el móvil no para de sonar o tienes la tentación de abrir Netflix. Crea un espacio de estudio libre de distracciones, donde te sientas cómodo y puedas concentrarte sin interrupciones. Silencia el móvil (o mejor aún, déjalo en otra habitación), cierra pestañas innecesarias en tu ordenador y prepárate para darlo todo.
Si te cuesta mucho desconectar del móvil, prueba aplicaciones como Forest, de las cuales ya hemos hablado en nuestras redes sociales, que te ayudarán a mantenerte concentrado mientras ves cómo crece un árbol digital o cumples tus metas diarias.
Descansa bien, estudia mejor
No subestimes el poder de un buen descanso. Por mucho que creas que estudiar horas interminables te ayudará a aprender más, lo cierto es que tu cerebro necesita desconectar para asimilar bien la información. Dormir bien y hacer pausas regulares no es perder el tiempo, es optimizarlo.
Prueba a organizar tu día de manera que puedas dedicar tiempo al estudio y también a actividades que te relajen, como salir a caminar, hacer ejercicio o simplemente ver una serie. El balance es clave para que tu rendimiento esté al 100%.
Planifica tu semana
No hay nada como una buena planificación para evitar agobios. Dedica unos minutos al principio de cada semana para hacer un planning de estudio.
Divide tus tareas diarias de manera equilibrada y asegúrate de que sean realistas. Establece objetivos claros y, si puedes, usa un calendario o una agenda para tener todo bajo control.
Como ves, aunque ponerse a estudiar no siempre es una tarea fácil, hay ciertas cosas que te pueden ayudar. Esperamos que estos consejos para organizar y planificar el estudio.
En Apapel sabemos que la vida de los estudiantes no es fácil, pero no te preocupes que estamos aquí para hacer tu camino más fácil. Tú estudia, que nosotros nos encargamos del resto.
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Sea cual sea tu papel, te lo ponemos fácil.